La recién aprobada Ley de Agentes Extranjeros busca ordenar las finanzas y la rendición de cuentas de las organizaciones no gubernamentales (ONG) que reciben fondos de la cooperación exterior, tras denuncias de mal uso de estos recursos, según expertos en sociología y ciencia política.
El politólogo Óscar Peñate Martínez afirmó que esta normativa viene a cubrir un vacío legal que algunas ONG han utilizado para desestabilizar social y políticamente a El Salvador. Señaló que estas organizaciones han estado involucradas en actividades que van desde la conspiración y el lavado de dinero hasta el enriquecimiento ilícito de sus directivos, así como en actos de desorden público y vandalismo.
Peñate Martínez también destacó que la ley, aprobada el pasado martes con el respaldo de 57 diputados de Nuevas Ideas, PCN y PDC, era necesaria debido a que algunos activistas que se presentan como miembros de la sociedad civil en realidad son parte de ONG fachada vinculadas a los partidos ARENA y FMLN.
Además, indicó que estas ONG aprovechan la vulnerabilidad de los sectores más humildes para sostenerse económicamente y llevar a cabo acciones que, en su opinión, ponen en riesgo la seguridad del Estado, siguiendo lineamientos globalistas, ideologías woke y la agenda 2030.